HOTEL SANTA MARÍA LA ANTIGUA

¡Ya no tengo nostalgia del paraíso!

Según recorremos los 5 km que nos llevan del pueblito de Buena Vista al hotel Haciendas Santa María La Antigua en Bolivia, vamos apreciando los hermosos paisajes naturales que nos rodean. Este hotel, próximo al Parque Nacional Amboró, es una experiencia única, 2500 hectáreas de terreno y 5000 cabezas de reses, nos pueden hacer una idea del entorno asombroso donde nos encontramos. Rodeado de unos jardines bien cuidados, las habitaciones son sencillas con algún detalle indígena y muy limpias. El restaurante es una especie de gran palapa al aire libre por la que se pasean perezosamente los pavos reales, realmente es una delicia desayunar viendo los primeros rayos del sol. Los fines de semana se suele preparar un delicioso cordero a la cruz y todas las mañanas a las 6 en punto se sirve lo que se conoce como ambrosía, que es la primera leche ordeñada, mezclada con un licor de la región que yo no probé porque soy intolerante a los lácteos.

Os puedo asegurar que durante las primeras horas de mi estancia allí, estuve totalmente descolocada, ¡tal es mi dependencia de las redes! no disponíamos de wifi, ni televisión ni prensa. Supongo que esa es una decisión muy meditada por parte del hotel, que te obliga a interactuar con el medio ambiente. Gracias a esto, he descubierto cosas que había olvidado hace mucho tiempo. ¡Hay tanto que hacer! Paseos a caballo entre los pantanales escuchando el sonido de los monos y el intenso alboroto de loros y tucanes, observar fascinados a los caimanes y sus crías en la pequeña reserva ecológica, asistir a un arreo de ganado y admirar la habilidad de los vaqueros para reunificar esa tremenda cantidad de reses. ¡Se te pasa el día volando! Por la tarde siempre puedes acercarte al Spa Samui, una construcción oriental edificada sobre un pequeño estanque donde nadan carpas rojas a las que alimentas antes de recibir el beneficio de un masaje sensorial y luego dormir un ratito de siesta en las hamacas dispuestas por cualquier sitio.

Si lo que buscas es paz, has llegado al lugar indicado. Aquí no encontrarás cientos de turistas y miles de ruidos. Por momentos, nos hemos sentido casi los dueños del lugar con libertad absoluta para movernos a nuestro antojo. ¡Hasta las tormentas me han parecido hermosas! Escuchar el agua borboteando en los tejados y aspirar el aroma a tierra húmeda mezclado con flores exóticas y embriagadoras, es una experiencia increíble. Aquí me he encontrado un universo entero, no sabía que existían tantos tipos de azules en el cielo ni tantas luces doradas en los rayos que se cuelan entre el extenso follaje. El silencio me invade mientras doy fin a una limonada contemplando la belleza de la bóveda celeste de una noche tropical……

Carmen

 

6 thoughts on “HOTEL SANTA MARÍA LA ANTIGUA

  • 16 marzo, 2017 at 12:27 am
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    Naturaleza en estado puro. Me encantan las fotografias, la verdad que tenia que ser obligatorio para la salud ,una cura para el cuerpo y el alma total .besines . Myla
    http://dreamsatfifty.com

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  • 16 marzo, 2017 at 4:52 pm
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    Un paraíso la verdad que tiene que ser increíble poder disfrutar de tanta belleza junta. Por cierto qué bien escribes Carmen! Me has trasladado en un abrir y cerrar de ojos allí.
    Un besazo muy muy grande.

    http://www.starsandbeautypage.es

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  • 17 marzo, 2017 at 9:56 am
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    Preciosas fotos, un lugar magnífico. Me encantan todos tus looks informales, especialmente la blusa blanca y el último vestido.

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  • 17 marzo, 2017 at 6:07 pm
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    Los dientes largos Carmen, qué pasada!!! Un placer disfrutar de estas preciosa fotos…
    Besitos guapa, Emi

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  • Pingback: VERDE SELVA - Cincuentayque

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