UN LOOK FRAMBUESA

¡Mamá, pareces una frambuesa! Este es el comentario de mi hijo, partido de la risa, mientras vamos a un parque cercano a hacer las fotos. La verdad, es que me ha sorprendido esta observación porque a estas alturas, el pobre ya ni se inmuta aunque vaya disfrazada. El caso es que el abrigo que llevo hoy, me atrajo como un imán desde que lo vi colgando de la percha en Mango. Pasé varias veces por su lado mirándolo de reojo tratando de procesar qué me estaba ocurriendo, el frambuesa o fucsia o como queramos llamarlo, está tachado de mi lista de colores desde hace mucho tiempo, por lo menos en invierno. Supongo que sabéis que los colores emiten vibraciones e inciden en nuestro estado emocional y esta tonalidad en concreto, está relacionada con la pasión profunda. ¿Pasión?… Me quedé en estado de shock allí mismo, en la tienda. Con mi marido en el quinto pepino y el mes que llevo de mudanza, papeleos y problemas que me surgen hasta de debajo de las piedras, mi body no está para muchos arrebatos ni acaloramientos, pero aún así, contra todo pronóstico, me lo compré. Lo he combinado con prendas y accesorios en negro porque creo que forman un tándem perfecto. Llevo un jersey de cuello alto y un pantalón denim debajo y como las cosas se me siguen torciendo, no he podido encontrar mis sneakers negras entre tanta caja y he tenido que recurrir a mis botas de taconazo. El resultado no es tan casual pero queda igualmente bien. Por último, he añadido un bolso de ante con unas asas muy originales y una boina de pelo. El llaverito de corazón es de la tienda Save my bag donde podéis encontrar también bolsos muy originales de neopreno en todos los colores. ¡Os deseo un feliz fin de semana y os agradezco todos vuestro comentarios y emails! Un besito